¿Cuándo necesito una endodoncia?

De un día para otro, nos aparece un problema bucodental y no sabemos qué hacer. Nos resistimos a ponernos en manos de un experto, ¿verdad? Es como si esperásemos que desapareciera por arte de magia. Pero no. Entonces, nos solemos preguntar cuándo necesito una endodoncia o si es la solución para nuestros problemas. Vamos a analizarlo. 

Lo primero que tienes que saber es que una endodoncia no es uno de los tratamientos para mejorar tu sonrisa que tenemos a nuestra disposición. Se trata de un procedimiento cuyo objetivo no es otro que corregir un problema serio en uno o vario de nuestros dientes. 

Pero, por lo que sea, nos resistimos a someternos a una. En otras ocasiones, ponemos como excusa su coste. Por suerte, los precios de un endodoncia multirradicular son bastante asequibles y, además, nos ofrecen una serie de ventajas para nuestra salud bucodental que deberíamos aprender a valorar. 

Entonces, ¿cuándo necesito una endodoncia?

Una endodoncia es necesaria cuando el tejido blando dentro del diente, llamado pulpa, se inflama o se infecta. Esto puede ocurrir por varias razones. Aquí te explicamos las principales situaciones en las que podrías necesitar una endodoncia:

• Caries profundas.
  Cuando una caries no se trata a tiempo, puede progresar y penetrar el esmalte y la dentina, llegando a la pulpa dental. Para identificar esta situación, tendremos que fijarnos en algunos de sus principales síntomas, como dolor intenso en el diente (especialmente al masticar o al consumir alimentos o bebidas calientes o frías), sensibilidad prolongada al calor o al frío o dolor que puede ser continuo o intermitente.
• Infección o absceso dental.
  La pulpa dental puede infectarse debido a bacterias que ingresan a través de una caries profunda, un diente agrietado o roto, o una fractura dental. En estos casos, sufriremos un dolor dental severo que puede irradiarse a la mandíbula, el cuello o el oído. También es muy normal que se den casos de hinchazón en las encías cerca del diente afectado o sensibilidad en el diente al tacto o al masticar. En los casos más severos, se darán episodios de fiebre o malestar general en casos de infección grave y la aparición de una bolsa de pus (absceso) en la encía.
• Lesión o trauma en el diente.
  Otra de las situaciones en las que podemos pensar si necesito una endodoncia es en casos de padecer un golpe fuerte en la boca o un accidente que cause una fractura o daño significativo al diente puede afectar la pulpa dental, incluso si no hay una fractura visible. En estas situaciones, sufriremos dolor inmediato y severo en el diente afectado. Además, también se han registrado casos de cambio de color del diente (se vuelve grisáceo o negro), de sensibilidad persistente o dolor al masticar o de inflamación o hinchazón en la zona afectada.
• Fractura o fisura del diente.
  Las fracturas o fisuras en un diente pueden permitir la entrada de bacterias a la pulpa, lo que puede llevar a una inflamación o infección. Si padeces dolor al masticar o al liberar la presión de masticar, así como sensibilidad al calor y al frío que no desaparece rápidamente seguramente tengas que plantearte la posibilidad de someterte a una endodoncia. En estos casos, pueden darse situaciones de dolor intermitente o constante.. 

¡Ya no tienes excusa para plantearte si necesito una endodoncia! Estamos ante un tratamiento esencial para salvar un diente cuya pulpa está dañada o infectada. Si experimentas alguno de los síntomas mencionados, es importante que visites a tu dentista lo antes posible para una evaluación y tratamiento adecuados. Un tratamiento temprano puede aliviar el dolor y evitar la pérdida del diente.