Señales que te indican cuándo ir al psicólogo
Decidir cuándo ir al psicólogo puede convertirse en una decisión difícil de tomar. Posiblemente, sea uno de los pasos más importantes que puede dar una persona a la hora de recuperar e incrementar su bienestar general, de ordenar su día a día y fortalecer su toma de decisiones.
También es cierto que hay ciertos casos particulares en los que acudir a un especialista en este campo es necesario o muy recomendable. Cualquier problema que nos supere, que afecte de manera excesiva a nuestra rutina o nos ocasione malestar y sufrimiento debe ser abordado gracias a la intermediación de un profesional que nos ayude a reconducir la situación.
Lo cierto es que los motivos para ir al psicólogo son variados. De esta forma, podemos destacar algunos como:
- Problemas personales de ansiedad o malestar
- Situaciones dolorosas de duelo, separación sentimental, enfermedades o traumas
- Inconvenientes con las relaciones personales o familiares
- Deseo de tomar un nuevo rumbo en nuestra vida
Según cuenta la psicóloga Ángela Gual, al acudir a un experto, estamos empezando a ser conscientes de que tenemos dificultades que cada vez nos afectan más, nos limitan como personas y no somos capaces de encontrar el camino de salida a esta situación.
Si queremos saber si debemos ir al psicólogo, hay ciertas señales que nos lo pueden indicar:
- Has padecido un trauma pasado que afecta a tu día a día
Pueden ser variados, como la muerte de un ser querido o la pérdida del trabajo. Estas situaciones, si no se asimilan de manera correcta, pueden causar daños, provocando aislamiento o alterando nuestra capacidad para dormir.
- Padeces problemas físicos sin explicación médica
Algunos ejemplos pueden ser dolores frecuentes de cabeza o estómago. Estrés, ansiedad o distintos problemas emocionales pueden manifestarse a través de inconvenientes físicos.
- Incapacidad para disfrutar
Es una señal bastante habitual de que algo no anda bien. Se presenta en forma de desilusión generalizada y la persona puede llegar a percibir que las actividades que antes le producían placer, ya no tienen sentido. Según la Sociedad Española de Psicología Clínica y de la Salud (SEPCyS), acudir a un psicólogo es una buena medida para reconducir la situación.
- Tus relaciones se ven afectadas
No solo con nuestra pareja, sino también con nuestros amigos y familiares. Si ya no estás a gusto con ellos, si te sientes desconectado o con dificultades para comunicar lo que sientes, es probable que necesites ayuda.
- Recurres a sustancias adictivas para hacer frente a tus problemas
El alcohol, el tabaco o las drogas son la “vía de escape” para no pocas personas. Pero también otras que parecen menos dañinas, como la comida y sentir un deseo excesivo por ella.
- Tus soluciones no funcionan
No son pocas las personas que perciben que algo no va bien y que buscan ayuda en charlas con amigos y familiares, practicar deporte o iniciar técnicas de autoayuda. Sin embargo, y pese a los esfuerzos, no ven progreso alguno. En estos casos, ir a un psicólogo o a un terapeuta es algo que podemos calificar como necesario.